Llers es un pueblo pequeño, de apenas mil habitantes en la provincia de Girona, pero a finales de los 80, algo increíble sucedió allí. Un grupo de chicas, lideradas por Joan Suñer, se atrevió a hacer lo impensable en esa época: formar un equipo de fútbol femenino. En una época en la que ser mujer y jugar al fútbol no era nada fácil, con mucho esfuerzo y perseverancia, esas chicas no solo formaron un equipo, sino que lograron algo extraordinario: llegaron a la primera división del fútbol español. Algunas incluso alcanzaron las selecciones catalana y española. Era una historia de lucha y superación que merecía ser contada.
Joan Suñer, fiel guardián de esa historia, había acumulado una gran cantidad de recortes de periódicos y documentos desde aquellos días mágicos. Todo aquello había estado guardado durante años en cajas, acumulando polvo en su garaje. Sabía que tenía que hacer algo para preservar esos recuerdos, antes de que el tiempo los deteriorara. Finalmente, el ayuntamiento decidió apoyar la causa. Consiguieron algo de financiación y vinieron a vernos.
Desde el momento en que escuchamos a Joan hablar con tanta pasión sobre aquellos años, nos sentimos inmediatamente conectados con la historia. Teníamos una gran responsabilidad entre manos: recopilar los testimonios de las jugadoras y narrar la historia con la fidelidad y emoción que merecía. Así que, después de nuestra primera reunión, presentamos un plan de trabajo para guionizar el documental.
No sabíamos si sería posible capturar toda la magia de aquellos tiempos, pero con el esfuerzo y la colaboración de todos los implicados, las piezas comenzaron a encajar. De este modo nació “Les bruixes del futbol”.
El estreno fue algo inolvidable. La sala social del pueblo estaba completamente llena, no había ni un solo asiento libre. Fué una tarde cargada de emociones, donde las lágrimas y los recuerdos se entrelazaban en un ambiente que solo puede describirse como mágico. Fue más que un simple estreno; fue un homenaje a la perseverancia y el esfuerzo de esas chicas que habían cambiado la historia del fútbol femenino desde su pequeño pueblo.
Pero lo más increíble fue que no todo terminó allí. Poco después del estreno, la cadena autonómica TV3 mostró interés en el documental y lo incluyeron en su programación. Fue un logro que llevó la historia de estas pioneras mucho más allá de lo que nunca habríamos imaginado. Además, para nuestra sorpresa, el trabajo nos valió el Premio Carles Rahola de comunicación.
La satisfacción fue inmensa. No solo habíamos ayudado a contar una historia increíble, sino que, gracias al esfuerzo y dedicación de todos los implicados, esa historia trascendió las fronteras del pequeño pueblo de Llers. Ver cómo la historia de esas chicas, que un día decidieron desafiar las normas y jugar al fútbol, ahora resonaba tan lejos, nos llenó de orgullo y alegría.